Es verano, las playas están llenas de gente que aprovecha las vacaciones para broncearse o sin más descansar. Otras muchas familias se han tenido que quedar en sus casa, el paro los sueldos que van encogiendo y la situación difícil por la que pasan algunos miembros de la familia, ha dejado a muchos sin vacaciones. Mientras esto ocurre muchas personas dedican sus vacaciones y gran parte de su tiempo a ayudar a los demás. Cada día, trabajadores de la asistencia humanitaria brindan ayuda a millones de personas en todo el mundo sin importar quiénes son y dónde se encuentran. Más de medio millón de personas se ocupan de tareas humanitarias
El día 19 de agosto es el día Mundial de la Asistencia Humanitaria, que este año tiene el lema "Ayudarse unos a otros". En 2008 la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó esta Resolución. Muchas de estas personas pierden la vida cuando trabajan para los demás. Los datos facilitados por Naciones Unidas nos dicen que desde 2011, unas 109 personas que se dedican a trabajos humanitarios han sido asesinadas, 143 han resultado heridas y 132 han sido secuestradas. Este día es una buena oportunidad para reconocer a a estas personas que desinteresadamente dan lo mejor de ellas mismas para ayudar a aquellos que sufren.
Es también un buen momento para recordar a los países su responsabilidad y sus compromisos. La crisis ha supuesto una reducción considerable de los presupuestos que los países desarrollados tenían comprometidos con la ayuda humanitaria. Oxfam internacional alertó que: "el primer recorte en ayuda al desarrollo de los últimos 14 años costará muchas vidas. Cientos de miles de personas pobres tendrán que apañárselas sin las medicinas que tanto necesitan y muchos más niños y niñas dejarán de ir a la escuela debido a los primeros recortes en ayuda al desarrollo que se producen desde 1.987 que encabeza España". Los Presupuestos Generales del Estado para 2012 confirman una severa caída de la ayuda oficial al desarrollo (AOD) española, tras haber experimentado un recorte de 1.631 millones de euros en relación a lo presupuestado en 2011.Estas cifras dan como resultado una reducción de la ayuda del 47,6%, dato que viene a sumarse a los bajos niveles registrados en 2011.
De otro lado el recorte de prestaciones sociales y de derechos están incrementando de manera alarmante los indices de pobreza en nuestro país que afecta particularmente a los niños y a las personas más vulnerables.
Debemos luchar por frenar esta escalada y sobre todo estar ahí trabajando y apoyando a aquellas personas que dedican lo mejor de sus vidas a la asistencia humanitaria. Hagamos real el lema de este día: ayudandonos unos a otros.
domingo, 19 de agosto de 2012
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