jueves, 28 de febrero de 2013

28F DÍA DE ANDALUCÍA

   
                  La mejor Granada y la mejor Andalucía

El pasado viernes celebramos en Granada el acto institucional en el que conmemoramos el Día de Andalucía y, como cada año, el eje central del mismo ha sido el homenaje a las personas, colectivos y entidades que representan la mejor Granada y la mejor Andalucía. La Granada que nos llena de orgullo y en la que confiamos para salir de la crisis y para conquistar un futuro mejor. Un acto simbólico y emotivo que evidenció desde el principio hasta el fin que somos un pueblo que comparte historia, anhelos, sacrificios y esperanzas.
Es precisamente desde la sociedad civil, que tan magníficamente está representada en las personas y entidades homenajeadas con motivo del 28 de Febrero, desde donde debe forjarse hacia las instituciones ese gran acuerdo por Andalucía, un gran pacto que exprese el sentir mayoritario de los andaluces y andaluzas en unos tiempos tan cruciales en los que tenemos que estar alertas para defender todos los derechos que hemos conquistado en las tres últimas décadas y aunar esfuerzos para salir de la crisis sin dejar a nadie en el camino.
La conmemoración del 28-F como Día de Andalucía hace inevitable mirar hacia el pasado reciente de esta tierra, que protagonizó hace 33 años una respuesta histórica en las urnas, en el referéndum de acceso a la autonomía. Con aquel referéndum, nuestra comunidad logró el acceso a la autonomía plena a través del artículo 151 de la Constitución, y lo hizo en igualdad de condiciones que otras nacionalidades históricas, abriéndole así paso a otros pueblos y desencadenando una serie de cambios políticos, sociales y económicos sin precedentes.
El autogobierno estaba en marcha, incluso antes. Andalucía también habló masivamente el 4 de Diciembre de 1977, con unas movilizaciones que fueron un aviso del espíritu que latía en el corazón del pueblo andaluz.
El hilo conductor de ambos hitos, 28-F y 4-D, es el mismo protagonista: el pueblo andaluz. Un pueblo unido por la conciencia de acabar con los obstáculos políticos y económicos que lastraban el despegue de esta tierra, un centralismo despectivo y paternalista que nunca ha sabido ver ni entender a Andalucía.
Como vemos, la unión del pueblo andaluz ha sido un pilar fundamental para tejer nuestra historia. Ahora, cuando conmemoramos aquel 28 F, tenemos que reafirmar aquella alianza sellada por todos, por dirigentes políticos, empresarios, sindicatos y la propia sociedad civil; como la suma de voluntades para iniciar un nuevo período histórico, para alcanzar un gran Pacto por Andalucía desde dónde afrontar los retos que tenemos por delante, sin que nadie se quede atrás, sin que la salida de la crisis signifique renunciar a todo lo que hemos conseguido con el esfuerzo colectivo.
El pueblo andaluz fue protagonista del inicio de su autogobierno y debe seguir siéndolo ahora. Un pueblo que busca respuestas contra la crisis, contra el paro que atenaza a tantas familias. Una crisis que amenaza conquistas y prestaciones asociadas al Estado del Bienestar.
En ningún caso estamos dispuestos, desde Andalucía, a renunciar a esas conquistas. No estamos dispuestos a dar ni un paso atrás. Han sido muchos los derechos que hemos ganado gracias a la autonomía y grandes, también, e importantes, las transformaciones que ha vivido Andalucía.
Tenemos que seguir preservando una sanidad, una educación y unos servicios sociales públicos que encarnan una imagen reconocible de España, y muy particularmente, de Andalucía. Así como el principio de igualdad, que es la mejor interpretación del ánimo y la voluntad de presente y de futuro de los andaluces y las andaluzas.
La educación, la sanidad y los servicios sociales públicos se erigen, de hecho, en el fundamento de la igualdad, cuya mejor versión es la posibilidad de que toda la ciudadanía disfrute de las mismas oportunidades de futuro superando obstáculos y diferencias.
A pesar de las dificultades actuales, nos enfrentamos al futuro con fuerza e ilusión. Y porque estamos orgullosos de nuestro pasado, nos reafirmamos en nuestro compromiso, en el compromiso de todos y todas con esta tierra, con su identidad y su enorme capacidad, demostrada, para superar las dificultades.
Este año la Junta de Andalucía en Granada ha entregado una bandera andaluza a la Cooperativa Aceites de Granada Tierras Altas, la Asociación de la Prensa de Granada, la red de Residencias Escolares, la Asociación de Jóvenes Empresarios, la Asociación de Vecinos del bajo Albayzín, la Federación de Asociaciones de Mujeres Valle de Lecrín, las Familias Acogedoras de Menores en Protección, el Ayuntamiento de Orce y a Mariano Sánchez Pantoja, coordinador del Teatro Alhambra. También hemos reconocido a titulo póstumo al Doctor Olóriz con motivo de su centenario y nos unimos a la distinción que el Gobierno Andaluz hizo a los granadinos Miguel Rodriguez Acosta y Patricio Cárceles con la entrega de la medalla de Andalucía.
Todos y cada uno de ellos y ellas representan a la mejor Granada y con este reconocimiento la Junta quiere poner en valor el trabajo y el esfuerzo de quienes cada día construyen Granada y construyen Andalucía.
La solidaridad, el trabajo cooperativo, el emprendimiento, la responsabilidad social, la lucha por la igualdad, el valor de la cultura y del turismo como principales fortalezas, la educación como pilar de la igualdad de oportunidades… Con este magnífico capital humano, representado por las personas y entidades homenajeadas este año con motivo del 28 F, es imposible no tener confianza en un futuro mejor.
Celebremos la fiesta de Andalucía con la misma ilusión y determinación con la que empezamos a construir nuestro autogobierno, hace ahora 33 años.
                MARIA JOSÉ SÁNCHEZ RUBIO
(Publicado en el Diario IDEAL de Granada el 28F del 2013)

domingo, 17 de febrero de 2013

AHORA A POR LOS AYUNTAMIENTOS

Cuando cualquier vecina o vecino de nuestros pueblos tiene algún problema ¿sabéis a donde va? a su ayuntamiento. Cuando el pueblo es pequeño, a cualquier hora del día, a veces de la noche, a casa de su alcalde o alcaldesa o de sus concejales. Eso nos ha llevado a decir una y otra vez que la política local es la que más se acerca a la ciudadanía. El Gobierno de Andalucía en el año 2.010 dio un paso importante en la defensa de la  Administración Local, aprobando la Ley de Autonomía Local de Andalucía (acceder al texto).Por vez primera en el ordenamiento jurídico español las competencias municipales aparecen con tal grado de precisión en una ley orgánica cualificada por el procedimiento de su elaboración, como es el Estatuto de Autonomía. En el mismo sentido, la ley añade al repertorio estatutario otras competencias, identificando potestades y especificando materias que refuerzan la exclusividad de la competencia municipal.
El objetivo es claro: garantizar la titularidad de competencias propias municipales con plena conciencia de la dificultad que supone delimitar materias inevitablemente compartidas y tratando de volcar el esfuerzo en clarificar las funciones que, en cada caso, correspondan a la Comunidad Autónoma o a los entes locales.Un importante esfuerzo para reconocer la mayoría de edad de los Ayuntamientos.
Esfuerzo que en estos momentos el gobierno del PP pone en riesgo con la reforma de la Administración Local cuyo anteproyecto de ley de racionalización y sostenibilidad de la Administración local fue aprobada recientemente por el consejo de ministros. El PP aprovecha, una vez más, la situación de crisis y su discurso de austeridad en la administración pública para ocultar una reforma claramente ideológica. Recentralización, eliminación de servicios públicos municipales, recorte de plantilla, etc., son medidas que van a suponer un riesgo cierto para la calidad democrática de los ayuntamientos.
El Gobierno Andaluz no va a ser cómplice del desmantelamiento de la competencias y autonomía de los ayuntamientos, así lo ha puesto de manifiesto su Presidente José Antonio Griñán que afirmó que la propuesta del Gobierno de Mariano Rajoy intenta “subordinar la democracia local a una eficiencia que acaba en la privatización de servicios públicos”. (más información). Debemos impedir que el PP desmantele o modifique sustanciamente el poder local y lo haga sin contar con los verdaderos protagonistas del mismo, los Ayuntamientos. Hay que exigir al Gobierno de Rajoy que abra espacios de debate y reflexión contando con los propios ayuntamientos, las diputaciones, comunidades autónomas así como personas expertas. Aún están a tiempo.