martes, 28 de febrero de 2012

CONSTRUYENDO ANDALUCÍA

Son ya treinta y dos años de andadura autonómica, desde aquel 28 de Febrero de 1980 en el que las andaluzas y los andaluces dejamos constancia de lo que queríamos (y de lo que no queríamos) y que, por si alguien no había entendido el mensaje, volvimos a repetir en las urnas el 20 de octubre de 1981, cuando refrendamos el Estatuto de Autonomía de Andalucía.
No es nostalgia traer a la memoria las dificultades que, como pueblo, tuvimos que enfrentar para conseguir doblarle el pulso al gobierno conservador de la UCD y poder acceder a la autonomía en igualdad de condiciones que otras nacionalidades históricas, abriendo puertas a otros pueblos y conquistando, al mismo tiempo, la posibilidad de vivir una transformación social, política y económica sin parangón en nuestra historia reciente. No es nostalgia, es satisfacción y orgullo para las generaciones que tuvimos la fortuna de vivirlo y es también un recuerdo obligado para que los herederos de aquella conquista autonómica conozcan, y amen, su historia como pueblo.
Estamos viviendo tiempos convulsos. La crisis económica internacional, a la que Andalucía no es ajena precisamente por ser miembro de pleno derecho de las economías occidentales, está generando muchas dificultades a familias, empresas y gobiernos.
Día tras día asistimos a la estampa dramática del desempleo, la precariedad, la incertidumbre…también a contrarreformas, a la pérdida de libertades… son tiempos difíciles, sobre todo para los más vulnerables, los más débiles. Las andaluzas y los andaluces que fuimos testigos directos de la preautonomía, que hemos sido partícipes de la construcción de la Andalucía democrática y moderna, tenemos en la retina aquellos tiempos difíciles que superamos con coraje, rebeldía, y ambición.
Aquél espíritu de superación del 28 de Febrero puede sernos muy útil también ahora, precisamente ahora. Si el sueño de la autonomía aunó las voces y las voluntades, la imperiosa necesidad de salir de la crisis todos juntos, sin dejar a nadie atrás, volverá a sacar lo mejor de nosotros mismos. Seguiremos construyendo Andalucía con nuestras principales señas de identidad: la solidaridad y la igualdad. Ni un solo paso atrás, ni siquiera para tomar impulso.
La Junta de Andalucía está demostrando que es posible compatibilizar las acciones de estímulo económico con el mantenimiento del Estado del Bienestar, está marcando la diferencia en su respuesta a la crisis y ha demostrado que no hay que reducir los servicios públicos fundamentales para cumplir con la senda de la consolidación fiscal.
Las conmemoraciones del 28 de Febrero están llenas de simbología y el homenaje que la Junta hace cada año, con motivo de su celebración, a las personas y entidades que se han significado por su aportación al prestigio y el bienestar de la Comunidad autónoma pretende ser un símbolo de la mejor Andalucía y la mejor Granada.
El Gobierno andaluz ha otorgado la medalla de Andalucía a la jueza Inmaculada Montalbán, una de las mayores expertas españolas en violencia de género y un ejemplo de jueza comprometida con la igualdad y con la sociedad de la que forma parte; y a José Luis García-Pérez, uno de los 28 científicos excelentes seleccionados para recibir el premio Internacional Early Career Scientists 2011, con el que se reconoce a los científicos biomédicos con potencial para convertirse en un líder mundial, que se licenció en la Universidad de Granada y que prestigia la investigación granadina con su trabajo en el Instituto de Biomedicina López-Neyra del Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud. Ahí los tienen: igualdad y justicia, talento e innovación y prestigio. Imposible no sentirnos orgullosos de nuestra gente.
Asimismo, la Junta ha reconocido también, con la entrega de una bandera andaluza, a: la líder social Encarnación Olmedo, por su acción lúcida, directa y permanente por el bienestar de los vecinos de la zona Norte de la capital, el Colegio de Gestores Administrativos de Granada, Jaén y Almería, por hacer de la calidad y la innovación su seña de identidad; el IES Generalife, por su ejemplar trayectoria de 25 años, Comotrans de Motril, la primera cooperativa de transportes de Andalucía y una embajadora de Granada en el exterior; los voluntarios de protección civil que participan en el operativo de vialidad invernal; la Fundación Sierra Nevada, la Asociación Parque Nueva Granada, la Asociación Casería de Montijo y la Asociación Anaquerando (por su implicación en la inserción laboral en la zona Norte de la capital); los profesionales del sistema público de salud que atienden a los inmigrantes, la cooperativa La Palma de la Costa Tropical, la Asociación de Turismo del Altiplano, la Asociación a favor de las personas con Discapacidad Intelectual (ASPROGRADES), el Curso Internacional de Saxofón de Montefrío, el Centro Andaluz de Medio Ambiente, la Federación de Asociaciones de Mujeres María Lejárraga y el colectivo de Corresponsales Juveniles por ser un enlace entre los jóvenes y el Instituto Andaluz de la Juventud.
Ahí los tenemos: un magnífico ejemplo del potencial humano, empresarial y social que tiene Granada, dieciséis poderosas razones para echarle un pulso a la desesperanza y para inspirar nuestro día a día. Para seguir construyendo la Andalucía que marca la diferencia, que da luz a otros pueblos.

María José Sánchez Rubio
(Artículo publicado en el diario IDEAL de Granada el 28/2/2012

1 comentario:

Carmen Perez dijo...

Treinta años de autonomía, ha sido una experiencia apasionante de cambio